Siete consejos básicos sobre la limpieza y el cuidado del cuero

Cómo limpiar y cuidar el cuero

El cuero debe cuidarse de forma adecuada para que no se estropee y mantenga su aspecto bello y elegante. Para que sepas cuál es la mejor forma de limpiarlo y tratarlo, te damos 7 consejos para mantener tus artículos de cuero como en el primer dia.

Evita la exposición prolongada al sol y aleja tus prendas de cuero y tus muebles tapizados en piel de fuentes de calor directo, para evitar deshidratación y decoloración.
Cuando llueve utilizar siempre paraguas cuando llevas tus prendas y complementos de cuero, porque el agua es muy perjudicial y estropea el cuero.
Guarda tus artículos de cuero en un lugar seco para evitar que se pueda originar moho.
Utiliza fundas de tela para proteger tus prendas de cuero y que no se rallen al contacto con cremalleras y hebillas de otros artículos al meter y sacar del armario.
No apliques perfumes directamente sobre tus prendas de cuero, porque puedes provocar manchas irreversibles.
No lavarlos de forma tradicional empapándolos en agua, ya que el cuero en contacto con el agua se estropea y pierde todas sus propiedades.
Limpiarlos con un paño húmedo y si tiene manchas impregnar el paño con unas gotas de jabón de PH neutro.

Asimismo, existen productos específicos para la limpieza del cuero.Con ellos lo que conseguirás es crear una película invisible que protegerá este material de agentes externos.

Nobuk. Requiere un cuidado especial porque se ralla con gran facilidad. Hay que evitar totalmente el contacto con el agua. Se trata de una piel altamente absorbente, que se puede limpiar sólo utilizando un producto limpiador para cuero en seco en formato espray ayudándote con un cepillo para remover la suciedad.
Carnaza. Presenta un tacto muy suave, pero se diferencia del nobuk en que es menos resistente, por lo que necesita tratamiento constante con crema para cuero.
Gamuza. Es uno de los materiales más suaves y delicados. Se trata de un material muy flexible, pero que requiere extremados cuidados, porque se deteriora su aspecto con el roce, el sol, el agua, y absorbe suciedad con mucha facilidad.
Cuero liso. Es un material muy resistente y por esta razon requiere menos cuidado que los interiores. Con el tiempo requiere cuidados de nutrición e rehidratación.
Cuero rectificado. Estos tipos de cueros son más resistentes e impermeables al principio, gracias a los productos aplicados.Para mantener la nutrición de la piel de cuero, se pueden utilizar productos acondicionadores a base de crema .
Charol. Con el paso del tiempo tiene propensión a formar arrugas, y también hay que tratar y limpiar el cuero de éste tipo para avivar sus colores.